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Los 5 brunchs de San Diego que merecen tu resaca de fin de semana

  • Foto del escritor: Diego Gil
    Diego Gil
  • 15 abr
  • 4 Min. de lectura

¿Buscando donde arrasar con unos huevos benedictinos dignos de tu Instagram? San Diego tiene la respuesta para tus mañanas de domingo.


San Diego no solo es paraíso de surfistas y amantes del sol eterno - también se está coronando como la capital no oficial del brunch en la Costa Oeste. Con la combinación perfecta de clima californiano (léase: perfecto 24/7), vistas al océano que te dejan sin aliento y una escena gastronómica que ha explotado en los últimos años, encontrar un buen brunch aquí es tan fácil como encontrar un influencer tomándose fotos en Balboa Park.

Pero seamos honestos: no todos los avocado toasts son iguales y algunos mimosas merecen un premio. Después de probar (y sí, sufrir por la ciencia) decenas de lugares, te traigo la lista definitiva de los spots que realmente valen cada caloría y cada dólar.


1. Madi: El templo rosado donde el brunch es religión


Ubicación: Adams Avenue

Lo imperdible: Panqueques soufflé que parecen salidos de una nube


Vamos a empezar fuerte: Madi es ese lugar que tus amigos cool ya conocen y del que no paran de hablar. Con su estética retro-futurista y ese inconfundible toque rosado en la decoración, es básicamente el paraíso para los amantes de Instagram.

Pero aquí lo importante: la comida realmente está a la altura del hype. Sus panqueques soufflé son prácticamente una experiencia religiosa - esponjosos, aéreos y tan perfectos que casi da pena destruirlos con el tenedor (casi). Las tostadas francesas con ricotta y miel son otro nivel, y si estás con resaca, sus huevos rancheros estilo Baja te devolverán a la vida.

Pro-tip: No te pierdas su Mimosa Flight. Sí, has leído bien, VUELO DE MIMOSAS. Porque una sola es para principiantes.


2. The Cottage: Donde los locales escapan de los turistas


Ubicación: La Jolla

Lo imperdible: Huevos benedictinos La Jolla y champagne de lavanda


The Cottage es ese lugar que ha sobrevivido 30+ años en La Jolla por algo. Instalado en una casita que parece sacada de un cuento, ofrece la quintaesencia del brunch californiano: relajado, sin pretensiones pero con ingredientes que te hacen cuestionar por qué el aguacate de tu casa nunca sabe así.

La experiencia al aire libre con brisa marina es incomparable, especialmente si logras conseguir mesa (spoiler: ve temprano o prepárate para esperar). Sus huevos benedictinos La Jolla merecen una mención especial, y la champagne de lavanda es ese toque extraño pero delicioso que no sabías que necesitabas en tu vida.

Advertencia: prepárate para compartir espacio con familias locales que llevan viniendo aquí desde antes que el brunch fuera tendencia.


3. Great Maple: El preferido de Michelin para tus gustos culposos


Ubicación: Hillcrest

Lo imperdible: Maple-bacon donuts (sí, donas con tocino)


Cuando un lugar logra el reconocimiento Michelin sin perder su alma, sabes que estás ante algo especial. Great Maple consigue ese equilibrio perfecto entre sofisticación y comfort food que te hace sentir adulto pero no demasiado.

El espacio minimalista y moderno contrasta maravillosamente con platos que son puro placer culposo, como sus famosas maple-bacon donuts. ¿Donas con tocino glaseado con maple? Suena como algo que inventarías a las 3 AM después de una noche de fiesta, pero sorprendentemente, funciona a la perfección.

La única queja: los precios reflejan ese brillito Michelin, así que quizás no sea para todos los fines de semana (a menos que tu cuenta de TikTok esté monetizada).


4. Café 21: Para los hipsters orgánicos que no admiten compromiso

Ubicación: Gaslamp Quarter

Lo imperdible: Pancakes horneados y mimosas artesanales


Si eres de los que lee las etiquetas de todo lo que consume y tiene una relación personal con tu barista, Café 21 es tu nuevo hogar espiritual. Este lugar lleva el concepto "de la granja a la mesa" tan en serio que casi esperas ver una vaca en la cocina.

Los pancakes horneados son una revelación (¿por qué nadie nos dijo antes que los pancakes pueden hornearse?), y las tartas saladas de huevo son el tipo de plato que te hace sacar el teléfono para una foto antes incluso de probarlo.

El verdadero highlight son sus mimosas artesanales con frutas de temporada exprimidas delante de ti. Seis sabores diferentes que pueden tomarse individualmente o en forma de vuelo degustación. Y sí, la música en vivo los fines de semana le da ese toque bohemio que hace que te sientas parte de una película indie.


5. Malibu Farm: El rooftop donde el brunch tiene vistas de millones


Ubicación: Seaport Village

Lo imperdible: Literalmente cualquier cosa, pero con esas vistas


Terminamos con un clásico californiano que recién llegó a San Diego. Malibu Farm se instaló en Seaport Village y trajo consigo todo el glamour de su ubicación original en Malibú.

Lo que hace único a este lugar es su impresionante terraza con vistas panorámicas de la bahía de San Diego. Es básicamente imposible tomar una mala foto aquí. La comida está a la altura del escenario: ingredientes orgánicos, presentaciones cuidadas y sabores limpios que no intentan impresionarte con excesos.

Es el lugar perfecto para un brunch especial, una cita que quieres que termine bien, o simplemente para cuando quieres sentirte parte del 1% por unas horas. El precio refleja la vista, claro, pero algunas experiencias merecen el gasto.


¿Has visitado alguno de estos lugares? ¿Tienes algún spot secreto de brunch en San Diego que debería estar en esta lista? ¡Déjanos tu comentario abajo y comparte tus experiencias bruncheras!



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